Descifrando las diferencias entre un sistema ERP y un CRM: Te lo contamos con detalle.

Tradicionalmente, las empresas han gestionado su negocio mediante el uso de varias aplicaciones englobadas en un mismo paquete como Microsoft Office o, más recientemente, Google Drive.

Algunas, incluso, siguen recurriendo al papel, especialmente en materia de contabilidad y facturación. Otras, por ejemplo, mantienen a sus clientes registrados y “a mano” mediante su número de teléfono, pero no disponen de un documento o ficha con sus datos más relevantes. Sin embargo, el contexto de transformación digital en el que nos encontramos actualmente está ayudando a generar nuevas necesidades a las empresas, entre las que se encuentra la búsqueda constante de la integración de la información.

Como solución a este problema, muchas son las organizaciones que, en los últimos años, han terminado recurriendo a la instalación de un ERP (Enterprise Resource Planning) o Sistema de Planificación de Recursos Empresariales. Gracias a esto, sus usuarios son capaces de integrar información, departamentos, procesos y muchos más elementos relacionados con el día a día de la empresa; todo en una única herramienta. Esto conlleva evitar duplicidades, minimizar errores e incrementar la eficiencia, entre otros beneficios.

Paralelamente, y con la tendencia de buscar generar valor para el cliente, también ha crecido el interés en torno a las plataformas de Gestión de Relación con el Cliente, conocidas como CRM (Customer Relationship Management). Esta aplicación permite un sinfín de interacciones entre la empresa y sus clientes, pues no solo aumenta la agilidad y minimiza los fallos a la hora de registrarlos y consultar sus datos e histórico, sino que, además, podemos generar presupuestos y oportunidades personalizados. De esta manera, el fin último de un CRM será maximizar los ingresos de la empresa al tiempo que aumenta la satisfacción de nuestros clientes.

El pasado mes de abril, la prensa se hizo eco del Índice de Transformación Digital 2022, una encuesta en la que participan más de 1000 empresas tecnológicas referentes en Estados Unidos y Europa, 110 de las cuales eran irlandesas. Los datos arrojados muestran como, impulsados por el efecto de la pandemia, el 88% de las empresas de Irlanda están a favor de aprobar nuevas estrategias digitales, que va en consonancia con el 80% que, efectivamente, aceleraron sus planes de transformación digital en este último año. Además, más de la mitad de las empresas irlandesas encuestadas señaló “buscar mejorar la experiencia del cliente” como objetivo principal en la transformación, y hasta dos tercios planean aumentar en al menos un 10% su presupuesto para tecnología en los próximos cinco años. 

A fin de mejorar su desempeño tecnológico, muchas de estas empresas han instalado un ERP en los últimos tiempos, lo cual se ha visto muchas veces complementado con un CRM, precisamente para cumplir su principal objetivo en el proceso de transformación digital. 

Pese a que ERP y CRM no son lo mismo, cuentan con una serie de similitudes que muchas veces llevan a confusiones y es probable que muchas empresas no se atrevan a dar el paso de llevar a cabo una transformación digital en la misma por inseguridad o dificultades al entender las diferencias entre estas dos herramientas de software. Por ello, es conveniente saber distinguirlas. A continuación, exponemos algunos de los contrastes más ilustrativos:

Sumado a lo anterior, cabe destacar que, aunque podemos encontrar empresas que operan con un mismo sistema para gestionar indistintamente las labores de ERP y CRM, algunas lo hacen con programas distintos. Esto último es susceptible de generar dificultades, ya que la gestión puede llegar a hacerse más difícil si tenemos que estar duplicando información o teniendo que “sincronizarla” de manera manual. 

Es por esto que la opción ideal (y la más cómoda) es la que podemos obtener con Odoo: la integración total de todas las herramientas que puedan sernos útiles para gestionar nuestra empresa y la centralización de toda la información en una misma base de datos. 

¿Y qué es Odoo? Se trata de un software de gestión empresarial integrado que contiene una amplia variedad de módulos para instalar, siendo uno de ellos el CRM. Dicho de otra manera, en Odoo, el CRM está incluido dentro del ERP, por lo que desaparece la necesidad de contar con múltiples programas. 

Además, este sistema es conocido por contar con dos opciones a la hora de realizar su implementación: Odoo Community y Odoo Enterprise. Con respecto a la versión Community, su principal ventaja es el precio: al tratarse de un software de código libre no hemos de pagar por licencias. Adicionalmente, en esta versión son los propios desarrolladores y usuarios quienes incentivan las modificaciones en la plataforma, así como la elaboración de manuales para su adecuado uso. En cambio, Odoo Enterprise sí tiene un coste de licencia.

Si pedimos opiniones sobre cualquier versión de Odoo, veremos que se suele aconsejar la contratación de un servicio de consultoría especializado que se encargue temporalmente de instalar dicho software y configurarlo en función de las necesidades específicas para, posteriormente, formar a los futuros usuarios del mismo. Esto se debe a que, al ser un sistema altamente personalizable, requiere de configuraciones adicionales para convertirse en nuestro ERP ideal. 

Si quieres tener toda tu empresa en una misma herramienta, ¡no lo dudes! En Bakata Solutions somos especialistas en implantación y personalización de Odoo Community, contáctanos y coméntanos tus necesidades: estaremos encantados de ayudarte.